BUENA SALUD-conocimientos que le otorgarán una herramienta práctica y positiva para el resto de su vida-parte 11-
SALUD Y BELLEZA
¿QUE NIVEL DE TENSION PUEDE SOPORTAR USTED?
¿Es posible conducir nuestra vida de modo que las tensiones no nos dañen física ni síquicamente? Por lo menos debemos esforzarnos en ese sentido. Hasta podemos usar las tensiones para mantener la salud. En realidad necesitamos cierto grado de tensión para vivir saludablemente.
Quizá el primer secreto de cómo convivir con las tensiones es descubrir el ritmo de trabajo que podemos realizar satisfactoriamente y el período de tiempo que podemos mantener ese ritmo sin que nos cause daño.
Cada uno de nosotros difiere en su capacidad para realizar determinadas tareas. Lo que para uno es un ritmo excesivo de trabajo, puede resultar satisfactorio y agradable a otro.
COMO LA TENSION PUEDE PRESERVAR SU SALUD
Desde que las máquinas automáticas han sustituido gran parte del trabajo manual del hombre, existe la tendencia al aburrimiento por el trabajo rutinario que no puede absorber sus energías ni despertar su interés, ni tampoco requiere el uso de sus talentos creativos.
Como resultado se produce una profunda insatisfacción que a su vez es causa de tensión emocional. A menos que esta circunstancia sea controlada puede desencadenar neurosis ansiosa y peor aún, neurosis depresiva.
Aún los niños pueden sufrir las consecuencias del aburrimiento en la escuela cuando no afrontan el desafío de aprender algo que sea nuevo para ellos.
Juan, que es el encargado de la caldera de un hospital, era una víctima del aburrimiento por automatismo. La caldera funciona automáticamente y requiere muy poco de la energía de Juan. El está allí presente sólo para alguna emergencia.
Juan perdió el interés por la vida. Comenzó a sentirse inútil y de poco valor. Le faltaba ambición y trataba de evitar el contacto con la gente. La esposa de Juan se dio cuenta que algo no andaba bien en la salud de su marido y le rogó que consultara a su médico.
Los análisis y demás estudios que se le hicieron resultaron, sin embargo enteramente normales. Finalmente, conversando con Juan, su médico reconoció cual era la causa real de su problema.
Estaba perdiendo interés en la vida porque en su trabajo no afrontaba desafíos suficientes. El médico supo que a Juan le hubiera gustado construir muebles de madera, así que le aconsejó comprar herramientas de carpintería y ocupar en esa actividad sus horas libres.
Le explicó que si continuaba inactivo eso agravaría su situación e implicaría continuos gastos médicos. Con ese nuevo hobby Juan pareció revivir. Renació en él el interés por las cosas y por las personas. Era como si hubiera descubierto la vida de nuevo.
COMO INTERRUMPIR LOS LARGOS PERIODOS DE TENSION
Continúa en parte 12