DESCUBRA: GUÍA QUE LE AYUDARÁ A COMPRENDER MEJOR A DIOS Y A CREER EN EL-parte 32-
ACERCA DEL FUTURO-parte 5-
- EL SUEÑO DEL REY Y USTED
Esta profecía revela la mano de Dios dirigiendo el surgimiento y la caída de las naciones. Dios conoce el pasado y esta profecía bíblica nos muestra que también conoce el futuro.
Si Dios dirige los movimientos de las naciones con tal precisión, seguramente puede guiar la vida de cada ser humano, Jesús prometió:
“Pues aún vuestros cabellos están todos contados. Así que, no temáis…” (Mateo 10:30-31)
La fe, un don de Dios, es el remedio para nuestras angustias y temores. La esperanza que Cristo nos inspira puede servir como una “segura y firme ancla” para nuestras almas (Hebreos 6:19).
Erasmo, erudito del siglo XVI, cuenta un incidente que ocurrió en uno de sus viajes por mar, que recordó el resto de su vida. En medio de una tempestad, el barco en el que viajaba encalló. Las violentas olas golpeaban la nave, que comenzó a romperse.
Hasta los curtidos marineros sentían temor. Los pasajeros estaban histéricos. La mayoría invocaba a su santo patrón, cantaban himnos o hacían promesas en alta voz.
Erasmo notó que una pasajera se comportaba en forma diferente, y escribió: “De todos nosotros, la única persona que permanecía serena era una joven madre que sostenía a un niño que alimentaba.
No gritaba ni hacia promesas apresuradas al cielo. Lo único que hacía era orar silenciosamente mientras apretaba al niño en su regazo.”
Erasmo comprendió que esta oración formaba parte de su vida regular. Parecía estar confiada en Dios.
Cuando el barco comenzó a hundirse, la joven madre fue colocada en una tabla, se le dio un palo como remo y fue lanzada a las olas. Tenía que sostener a su pequeño con una mano y remar con la otra.
Pocos pensaron que sobreviviría al oleaje. Pero su fe y su serenidad la salvaron. Con su hijito fueron los primeros en llegar a la orilla.
La esperanza en Dios puede hacer la diferencia –aún cuando el mundo parezca derrumbarse a nuestro alrededor. Estamos aquí porque la mano del Todopoderoso nos guía y nos mantiene a flote.
Si usted se allega a Cristo de todo corazón, El le dará una fe tal que lo guiará en medio de todas las tempestades de la vida. Descubra la paz sobrenatural que Jesús promete:
“La paz os dejo, mi paz os doy…No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo” (Juan 14:27)
¿Tiene usted esta paz en su corazón? Si la tiene, agradezca a Jesús, su Salvador. En caso contrario, ¿por qué no lo invita a entra en su vida hoy?