ALIMENTACION PARA EL PUEBLO DE DIOS –DIOS SIEMPRE NOS PROVEE-parte 3-
LA CARNE, LOS HUEVOS, LOS LÁCTEOS Y EL TIEMPO EN QUE VIVIMOS.-parte 2-
…Y permitió que la raza longeva comiera alimentos de origen animal para abreviar su existencia pecaminosa. Pronto después del diluvio la raza humana comenzó a decrecer en tamaño y en longevidad” (CRA-pág. 445)
“Más estas cosas sucedieron como ejemplo para nosotros, para que no codiciemos cosas malas, como ellos codiciaron. Y estas cosas le acontecieron como ejemplo, y están escritas para amonestarnos a nosotros, a quienes han alcanzado los fines de los siglos” (CRA-pág. 452).
“Las hortalizas, la legumbres, las frutas y los cereales deben constituir nuestro régimen alimenticio. Ni un gramo de carne debiera entrar en nuestro estómago. El consumo de carne es antinatural. Hemos de regresar al propósito original que Dios tenia en la creación del hombre”. (CRA-pág. 454).
“Los que esperan la venida del Señor, con el tiempo eliminarán el consumo de carne; la carne dejará de formar parte de su régimen. Siempre debiéramos tener este fin en cuenta, y esforzarnos para avanzar firmemente hacia él. No puedo pensar que en la práctica del consumo de carne nos hallemos en armonía con la luz que Dios le ha agradado darnos. Debiéramos subsistir a base de frutas, cereales, legumbres y hortalizas.
Si obramos guiados por principios en cuanto a estas cosas, si como reformadores cristianos educamos nuestro propio gusto, y colocamos nuestro régimen en armonía con el plan de Dios, podremos influir en otras personas, en esta materia, lo cual será agradable a Dios. (CRA-pág. 454).
“Deben verse mayores reformas entre los que pretenden estar esperando la pronta venida de Cristo. La reforma pro-salud ha de hacer una obra que todavía no se ha hecho. Hay personas que debieran estar despiertas ante el peligro de comer carne, pero que continúan consumiendo carne de animales, poniendo así en peligro la salud física, mental y espiritual. Muchos que están hoy solamente medio convertidos con respecto al consumo de carne abandonarán el pueblo de Dios para no andar más con él” (CRA-pág. 456).
“Si alguna vez hubo un tiempo cuando el régimen debería ser más sencillo, es ahora. No debemos colocar carne delante de nuestros hijos. Esta excita y fortalece las pasiones bajas, y tiende a amortiguar las facultades morales”. (CRA-pág. 466).
“El uso de carne tiende a animalizar la naturaleza, y a despojar a los hombres y mujeres del amor y la simpatía que deben sentir por cada uno. Estamos hechos de lo que comemos, y aquellos cuyo régimen se compone mayormente de carne llegan a una condición en la que ellos permiten que las bajas pasiones dominen por encima de las facultades superiores del ser” (CRA-pág. 466).
“Las facultades intelectuales, morales y físicas son rebajadas por el uso habitual de la carne. El uso de carne trastorna el organismo, anubla el intelecto y entorpece las sensibilidades morales. (CRA-pág. 457).
“En muchos puntos los peces se contaminan con las inmundicias de que se alimentan y llegan a ser causa de enfermedades. Tal es en especial el caso de los peces que tienen acceso a las aguas de las alcantarillas de las grandes ciudades. Los peces que se alimentan de lo que arroja las alcantarillas puede trasladarse a aguas distantes, y ser pescador donde el agua es pura y fresca. Al servir el alimento llevan la enfermedad y la muerte a quienes ni siquiera sospechan el peligro” (CRA-pág. 471). Continúa en parte 4