Feeds:
Entradas
Comentarios

Posts Tagged ‘gracia’

LA VERDAD ACERCA DE LOS ANGELES-RESPUESTAS FIRMEMENTE BASADAS EN LA PALABRA DE DIOS—parte 82-

LOS ÁNGELES DESDE EL PENTECOSTÉS HASTA LOS ULTIMOS DÍAS-parte 4

PABLO SALE DE DAMASCO

Mientras Pablo predicaba a Cristo en Damasco, todos los que lo oían se asombraban… La oposición se tornó tan fiera que no se le permitió a Pablo continuar sus labores en Damasco.  Un mensajero del cielo le ordenó que dejara el lugar por un tiempo; y fue a Arabia (Gálatas 1:17), donde halló un refugio seguro.

Allí, en la soledad del desierto, Pablo tenía amplia oportunidad para estudiar y meditar con quietud.  Jesús se comunicó con él, y lo estableció en la fe concediéndole una rica medida de sabiduría y gracia. (HAp. 102-103)

Las labores de Pablo en Antioquia, en unión con Bernabé, le fortalecieron en su convicción de que el Señor le había llamado a hacer una obra especial en el mundo gentil. 

En ocasión de la conversión de Pablo, el Señor había declarado que había de ser ministro a los gentiles, para abrir “sus ojos, para que se conviertan de las tinieblas a la luz, y de la potestad de Satanás a Dios; para que reciban, por la fe que es en mí, perdón de pecados y herencia entre los santificados” (Hech.26:18).

El ángel que le apareció a Ananías le había dicho de Pablo: “Instrumento escogido me es éste, para llevar mi nombre en presencia de los gentiles y de reyes, y de los hijos de Israel” (Hech.9:15). Y Pablo mismo, más tarde en su vida cristiana, mientras oraba en el templo de Jerusalén, había sido visitado por un ángel del cielo, que le ordenó: “Ve, porque yo te enviaré lejos a los gentiles” (Hech.22:21). (HAp. 129)

CORNELIO Y PEDRO

El mismo santo Vigía que dijo de Abrahán: “Le conozco”, conocía también a Cornelio, y le mandó un mensaje directo del cielo.

El ángel se le apareció a Cornelio mientras estaba orando.  Al oír el centurión que lo llamaba por nombre, tuvo miedo.  Sin embargo, sabía que el mensajero había venido de Dios, y dijo: “¿Qué es, Señor?” (HAp. 108-109).

“Envía, pues, ahora hombres a Jope, y haz venir a Simón, el que tiene por sobrenombre Pedro. Este posa en casa de cierto Simón curtidor” (Hech.10:5-6).  El ángel le dio información precisa acerca del lugar donde Simón el curtidor vivía.  Entonces el ángel del Señor visitó a Pedro, y preparó su mente para recibir a este hombre.

Cornelio obedeció con alegría la orden dada en la visión.  Cuando el ángel se retiró, “llamó a dos de sus criados, y a un devoto soldado de los que le asistían; a los cuales envió a Jope, después de haberles contado todo” (Hech.10:7-8). 

El ángel no fue comisionado para decirle a Cornelio la historia de la cruz; un hombre sujeto a las mismas fragilidades humanas y tentaciones que el centurión tenía, debía decirle acerca del Salvador crucificado y resucitado.  En su sabiduría, el Señor trae a aquellos que buscan la verdad, y los conecta con otros seres humanos que la conocen. (RH)

Inmediatamente después de su entrevista con Cornelio, el ángel fue a buscar a Pedro, que en ese momento estaba orando en la azotea de su alojamiento en Jope. (RH)

Fue con cierta renuencia que Pedro aceptó la orden divina.  Al relatar su experiencia, no defendió su actuación basándose en principios generales, sino en una excepción, debido a la revelación divina que había recibido.  Y el resultado lo sorprendió.  Cuando Cornelio le relató su propia experiencia, incluyendo las palabras del ángel que le había aparecido en visión, Pedro declaró:

“En verdad comprendo que Dios no hace acepción de personas, sino que en toda nación se agrada del que le teme y hace justicia” (Hech.10:34-35). (MR)

PEDRO LIBRADO DE LA PRISON

Continúa en parte 83

Read Full Post »

CRISTO EN SU SANTUARIO-parte 30-

EL MINISTERIO FINAL DE CRISTO EN EL SANTUARIO CELESTIAL-parte 8-

ESTAMOS VIVIENDO EN EL GRAN DÍA DE LA EXPIACIÓN-parte  1-

Estamos viviendo ahora en el gran día de la expiación.  Cuando en el ritual simbólico el sumo sacerdote realizaba la propiciación por Israel, todos debían afligir sus almas, arrepentirse de sus pecados y humillarse ante el Señor, si no querían verse separados del pueblo.  De la misma manera, todos los que desean que sus nombres se mantengan en el libro de la vida, deben ahora, en los días que les quedan de este tiempo de gracia, afligir sus almas ante Dios con verdadero arrepentimiento y dolor por sus pecados.  Hay que escudriñar honda y sinceramente el corazón.

Hay que deponer el espíritu liviano y frívolo al que se entregan tantos cristianos profesos.  Empeñada lucha espera a todos los que quieran subyugar las malas inclinaciones que tratan de dominarlos.  La obra de preparación es individual.  No nos salvamos en grupos.  La pureza y la devoción de uno no suplirá la falta de estas cualidades en otro.  Si bien todas las naciones deben pasar en juicio ante Dios, El examinará el caso de cada individuo de un modo tan rígido y minucioso como si no hubiese otro ser en la tierra.  Cada cual tiene que ser probado y encontrado sin mancha, ni arruga, ni cosa semejante.

Solemnes son las escenas relacionadas con la obra final de la expiación. Incalculables son los intereses que ésta envuelve.  El juicio se lleva ahora adelante en el Santuario Celestial. Esta obra se viene realizando desde hace muchos años.  Pronto –nadie sabe cuándo- les tocará ser juzgados a los vivos.  En la augusta presencia de Dios nuestras vidas deben ser pasadas en revista.  En éste más que en cualquier otro tiempo conviene que toda alma preste atención a la amonestación del Señor: “Mirad, velad y orad; porque no sabéis cuando será el tiempo”. “Pues si no velas, vendré sobre ti como ladrón, y no sabrás a qué hora vendré sobre ti” (Marcos 13:33;  Apoc.3:3).

Cuando quede concluida la obra del juicio investigador, quedará también decidida la suerte de todos  para vida o para muerte.  El tiempo de gracia terminará poco antes que el Señor aparezca en las nubes del cielo. Al mirar hacia ese tiempo, Cristo declara en el Apocalipsis: “¡El que es injusto, sea injusto todavía; y el que es inmundo, sea inmundo todavía; y el que es justo practique la justicia todavía; y el que es santo, santifíquese todavía! He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra” (Apoc.22:11, 12).

-Continúa en parte 31-

 

Read Full Post »

RECIBIREIS PODER-Persona, Presencia y  Obra del Espíritu  Santo-parte 35-

PARTICIPANTES DE LA NATURALEZA DIVINA

“Por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia” (2 Pedro 1:4)

 

Un cristiano fuerte es quien tiene a Cristo formado dentro, la esperanza de gloria.  Ama la verdad, la pureza y la santidad.  Gracias a su amor a la Palabra de Dios, su vitalidad espiritual lo lleva a buscar la comunión con los que viven en armonía con ella, a fin de poder captar cada rayo de luz que Dios comunica para revelar a Jesús, con el propósito de hacerlo más precioso para el creyente. 

El que tiene una fe sólida halla que Cristo es la vida del alma, y que para él es como una fuente que brota para vida eterna.  Así, con placer, somete todo poder personal a la obediencia de Dios.  El Espíritu, con su influencia vivificante, guardará a ese creyente en el amor de Dios.

A los cristianos se les escribe: “Gracia y paz os sean multiplicadas en el conocimiento de Dios y de nuestro Señor Jesús.  Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de Aquél que nos llamó por su gloria y excelencia, por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia; vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor. 

Porque si estas cosas están en vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al conocimiento de nuestro Señor Jesucristo. Pero el que no tiene estas cosas tiene la vista muy corta; es ciego, habiendo olvidado la purificación de sus antiguos pecados.  Por lo cual, hermanos, tanto más procurad hacer firme vuestra vocación y elección; porque haciendo estas cosas, no caeréis jamás. Porque de esta manera os será otorgada amplia y generosa entrada en el reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo” (2 Pedro 1:2-11).  -Review and Herald-

Read Full Post »

MENTE, CARÁCTER Y PERSONALIDAD-parte 140-

 

 

LAS DUDAS. Se hiere el corazón de Cristo al dudar, cuando El nos ha dado evidencias de su amor al dar su vida para salvarnos… tuviéramos vida eterna.–parte 5-

“Venid a mi todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar”

DUDAS CONSIDERADAS COMO HECHOS REALES: El método general que se aplica para educar a los jóvenes, no cumple la norma de la verdadera educación. La infidelidad está entretejida en los temas que se publican en los libros de texto, y se considera que los oráculos de Dios son cuestionables y hasta objetables. 

De este modo las mentes de los jóvenes se familiarizan con las sugerencias de Satanás, y las dudas que antes se albergaban se convierten en supuestamente en hechos probados, y la investigación científica que se lleva a cabo resulta engañosa como consecuencia de la manera como se interpretan y se pervierten los descubrimientos hechos.

QUE HACER CON LA DUDA: Se hiere el corazón de Cristo al dudar, cuando El nos ha dado tantas evidencias de su amor al dar su vida para salvarnos para que no pereciéramos sino que tuviéramos vida eterna.  Nos ha dicho exactamente lo que tenemos que hacer: “Venid a mi todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar”.

LAS DUDAS DESAPARECEN CUANDO SOMOS BENDICIÓN PARA LOS DEMÁS: Hay muchos que se quejan de sus dudas, que se lamentan de inseguridad en su relación con Dios. Esto a menudo es consecuencia de que no están haciendo nada a favor de la causa del Señor.  Traten fervientemente de ayudar y bendecir a los demás, y sus dudas y desánimo desaparecerán.

Los que están constantemente hablando de sus dudas y exigiendo evidencia adicional para disipar su nube de incredulidad, no están edificando sobre la Palabra.  Su fe reposa sobre circunstancias; se basan en los sentimientos.  Pero éstos por placenteros que sean, no son fe.  La Palabra de Dios es el fundamento sobre el cual se debe edificar nuestra esperanza del cielo.

PERMITAN QUE LOS RAYOS DE LUZ DISIPEN LAS SOMBRAS DE LA DUDA: Necesitamos llenarnos de toda la plenitud de Dios, y entonces tendremos vida, poder, gracia y salvación.

¿Cómo podemos lograr estas grandes bendiciones? Cristo murió para que pudiéramos recibirlas por la fe en su nombre.  Nos ha ofrecido ampliamente luz y vida.  Entonces, ¿por qué tenemos que insistir en fijar clavos para colgar de ellos nuestras dudas? 

¿Por qué no permitimos que los brillantes rayos del Sol de justicia resplandezcan en las cámaras del corazón y la mente, y disipen las sombras de la incredulidad?  Vuélvanse a la Luz, a Jesús, el precioso Salvador.

En lugar de contemplar las fallas y los defectos de otro ser humano, vuélvanse para considerar a Aquél en quien no hay imperfección.  Jesús es el “señalado entre diez mil”, el que es “todo amable”. Ningún ser humano debe ser nuestro modelo.  Dios nos ha dado un modelo perfecto en su Hijo unigénito, y al contemplarlo nos transformaremos a su imagen.  Miren a Cristo, cuyo trono es alto y sublime y cuyo manto de gloria llena el templo. 

Elena White

 

Read Full Post »