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APOCALIPSIS- SEMINARIO DE REVELACIONES-¡Estudio Bíblico Espectacular!–lección18-parte 1-

LA IGLESIA DE DIOS REVELADA

 

 

Recientemente alguien clamó con angustia: “Estoy tratando desesperadamente de encontrar la Iglesia de Dios pero. ¿qué esperanza tengo? Hay centenares de denominaciones e Iglesias en el mundo que se llaman cristianas. La mayor parte pretenden ser la verdadera Iglesia de Dios, y todas son semejantes en ciertos aspectos, y sin embargo diferentes en otros.  Yo no podría examinar las enseñanzas de todos estos grupos, aunque dedicara todo el tiempo libre que tengo.  Me siento frustrado y traumatizado.  Es como si Dios estuviera jugando a la escondida conmigo.  Todo parece tan inútil y tan sin sentido”. Trágicamente, millones comparten estos sentimientos. Tal vez Ud.  mismo se siente de la misma manera.

En el Apocalipsis Dios describe con tanta claridad su Iglesia de estos últimos días, una vez que Ud. sepa lo que El dice, podrá decidir muy fácilmente cuál es la Iglesia verdadera y distinguirla de todas las otras congregaciones. Será tan fácil para Ud. hacerlo como lo es individualizar la bandera de su país de entre todas las demás.

No es extraño que Satanás sienta pánico cuando la gente comienza a estudiar el libro del Apocalipsis.  El sabe que la Iglesia de Dios se describe claramente en el Apocalipsis, y utiliza toda táctica imaginable para impedir que dediquemos un serio esfuerzo a su estudio. Si todos entendieran el libro, el reino de Satanás estaría en una bancarrota inmediata, y el gran nombre de Dios y su noble Iglesia serían exaltados maravillosamente.

Examinemos la notable descripción que hace el Apocalipsis de la Iglesia de Dios.  Se encuentra en el capítulo 12. Lea por favor el capítulo entero antes de comenzar con esta lección.

 

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ESPERANZA PARA EL PLANETA TIERRA – EL FUTURO BRILLANTE DE UNA RAZA CAIDA –parte 24-

EL TIERNO CUIDADO DE DIOS-parte 3-

EL PODER DE LA ORACIÓN-parte 2-

Es increíble que Dios nos permita hablar con El. Sería imposible que Ud. consiguiera una audiencia  para hablar con el presidente de los Estados Unidos, pues él es prácticamente inaccesible, excepto para sus amigos personales y aquellos que están  a un nivel de importancia semejante al de él.

Pero en el caso de Dios, el gran Gobernante del universo, no hay que pedir audiencia pues tenemos acceso directo e inmediato a El, cuantas veces queramos. ¡Imagínese al gran Dios inclinando su oído omnisciente para escuchar nuestras quejas, peticiones y expresiones de gratitud!

Hay varios personajes en la Biblia que dialogaron con Dios. Tenemos a Moisés. Mientras estaba en comunión con Dios en el monte Sinaí, el pueblo de Israel adoraba un becerro de oro.  Dios le sugirió a Moisés que sería bueno destruir a Israel y escoger a otro pueblo que cumpliera mejor sus designios.

Moisés  razonó  con Dios. “¿Qué pensarán los pueblos de ti si después de sacarlos de la servidumbre en Egipto luego los destruyes en el desierto?” Moisés no le estaba diciendo nada nuevo a Dios. El Señor ya sabía lo que Moisés iba a decir y sin embargo permitió que Moisés razonara con El. ¡Imagínese, el omnipotente Dios permitiendo que una de sus criaturas le hiciera sugerencias!

Lo mismo sucedió con Abrahán cuando intercedió con Dios a favor de Sodoma y Gomorra (ver Génesis 18). El Señor permitió que Abrahán dialogara con El sobre el destino de las malvadas ciudades.

El caso de Jonás es particularmente interesante. Dios había mandado al profeta a Nínive para anunciar su pronta destrucción. “De aquí a cuarenta días Nínive será destruida”, era el mensaje de Jonás. Cuando los ninivitas escucharon el mensaje, se arrepintieron de sus pecados y cambiaron su mala conducta.  Al ver Dios la reacción positiva de Nínive decidió no destruirla. Esto enojó a Jonás quien fue y se sentó fuera de la ciudad para ver si Dios en verdad la iba a perdonar.

 La conversación que sigue es increíble. Jonás se portó como un niño malcriado y Dios como un padre tierno, cariñoso y paciente.  El profeta le dijo a Dios: “¿No es ésto lo que yo decía estando aún en mi tierra?… Porque sabía yo que tu eres Dios clemente y piadoso, tardo en enojarte, y de grande misericordia” (Jonás 4:2). Luego Jonás le pidió a Dios: “Te ruego que me quites la vida; porque mejor me es la muerte que la vida” (Jonás 4:3).  Pero Dios trató de razonar con él diciéndole: “¿Haces tú bien en enojarte tanto?” Imagínese, el gran Dios del universo, tratando de razonar con un profeta amargado.

Pero hay más.  Mientras Jonás esperaba fuera de la ciudad, Dios hizo crecer una calabacera para darle sombra sobre su cabeza.  Jonás se alegró de la calabacera, pero luego Dios preparó un gusano que hirió la calabacera, y se seco, e hizo soplar un recio viento solano que azotó a Jonás.  Si antes Jonás estaba enojado, ahora estaba furioso… 

Le dijo a Dios: “Mejor sería para mí la muerte que la vida” (Jonás 4:8).Cuando Dios procuró razonar pacientemente de nuevo con su profeta y le preguntó si estaba bien que se enojara tanto, Jonás le contestó aún muy enojado: “Mucho me enojo, hasta la muerte”. ¿Cómo Dios permitió que Jonás le hablara así? ¡Qué falta de respeto! Dios podría haberlo borrado de la existencia en un instante, pero nuestro Padre celestial no es así.  El permite que le hablemos, que nos quejemos, que roguemos y aún que discutamos con El.  Nos escucha y procura razonar con nosotros.

Veamos otros aspectos de la oración y de nuestra comunicación con Dios, que se encuentra en el cielo más distante. Aclaremos que la Biblia menciona tres cielos.

Continúa en parte 25

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FE Y OBRAS–parte 42-

“SIN FE ES IMPOSIBLE AGRADAR A DIOS”(Heb.11:6)-“LA FE SIN OBRAS ES MUERTA” (Sant.2:20)

LA EXPERIENCIA DE LA JUSTIFICACIÓN POR LA FE ES DELINEADA

CRISTO, EL CAMINO DE LA VIDA

“Jesús vino a Galilea predicando el Evangelio del reino de Dios, diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el Evangelio” (Mar.1:14,15).

El arrepentimiento está relacionado con la fe, y no es presentado con insistencia en el Evangelio como esencial para la salvación. Pablo predicó el arrepentimiento. Dijo:

Nada que fuese útil he rehuido de anunciaros y enseñaros, públicamente y por las casas, testificando a judíos y a gentiles acerca del arrepentimiento para con Dios, y de la fe de nuestro Señor Jesucristo” (Hech.20:20,21).

No hay salvación sin arrepentimiento.  Ningún pecador impenitente puede creer con su corazón para justicia.  El arrepentimiento es descrito por Pablo como un piadoso dolor por el pecado. Este arrepentimiento no tiene en sí ningún mérito por naturaleza, sino que prepara al corazón para la aceptación de Cristo como el único Salvador, la única esperanza del pecador perdido.

Cuando el pecador contempla la Ley, le resulta clara su culpabilidad, y queda expuesta ante su conciencia, y es condenado. Su único consuelo y esperanza se encuentran en acudir a la cruz del Calvario.  Al confiar en las promesas, aceptando lo que dice Dios, recibe alivio y paz en su alma. Su fe se aferra a Cristo, y es justificado delante de Dios.

Pero al paso que Dios  puede ser justo y sin embargo justificar al pecador por los méritos de Cristo, nadie puede cubrir su alma con el manto de justicia de Cristo mientras practique pecados conocidos, o descuide deberes conocidos.  Dios requiere la entrega completa del corazón antes de que pueda efectuarse la justificación, debe haber una obediencia continua mediante una fe activa y viviente que obre por el amor y purifique el alma.

Santiago escribe de Abrahán y dice:

“¿No fue justificado por las obras Abrahán nuestro padre, cuando ofreció a su hijo Isaac sobre el altar? ¿No ves que la fe actuó juntamente con sus obras, y que la fe se perfeccionó por las obras?

Y se cumplió la Escritura que dice:

Abrahán  creyó a Dios, y le fue contado por justicia, y fue llamado amigo de Dios.  Vosotros veis, pues, que el hombre es justificado por las obras, y no solamente por la fe” (Sant.2:21-24).

A fin de que el hombre sea justificado por la fe, la fe debe alcanzar un punto donde domine los afectos e impulsos del corazón; y mediante la obediencia, la fe misma es hecha perfecta.  (Elena White)

 

 

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