LAS PROMESAS DE LA BIBLIA-parte 40-
PERDÓN
Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos. (Mateo 5:44, 45)
Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas. Porque si vosotros no perdonáis, tampoco vuestro Padre que está en los cielos os perdonará vuestras ofensas. (Marcos 11:25, 26)
Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará también a vosotros vuestro Padre celestial. (Mateo 6:14)
Así que, si tu enemigo tuviere hambre, dale de comer; si tuviere sed, dale de beber… (Romanos 12:20)
Amad, pues, a vuestro enemigos, y haced bien, y prestad, no esperando de ello nada; y será vuestro galardón grande, y seréis hijos del Altísimo; porque él es benigno para con los ingratos y malos. Sed, pues, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso. No juzguéis, y nos seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados, perdonad, y seréis perdonados. (Lucas 6:35-37)
No digas: Yo me vengaré; Espera a Jehová, y él te salvará. (Proverbios 20:22)
PEREZA-parte 1-
Y que procuréis tener tranquilidad, y ocuparos en vuestros negocios, y trabajar con vuestras manos de la manera que os hemos mandado, a fin de que os conduzcáis honradamente para con los de afuera, y no tengáis necesidad de nada. (1 Tesalonicenses 4:11, 12)
En lo que requiere diligencia, no perezosos; ferviente en espíritu, sirviendo al Señor. (Romanos 12:11)
El que labra su tierra se saciará de pan; Más el que sigue a los ociosos se llenará de pobreza. (Proverbios 28:19)
La ley del sabio es manantial de vida Para apartarse de los lazos de la muerte. (Proverbios 13:14)
La mano negligente empobrece; Más la mano de los diligentes enriquece. El que recoge en el verano es hombre entendido; El que duerme en el tiempo de la siega es hijo que avergüenza. (Proverbios 10: 4, 5)
Porque también cuando estábamos con vosotros, os ordenábamos ésto: Si alguno no quiere trabajar, tampoco coma. Porque oímos que algunos de entre vosotros andan desordenadamente, no trabajando en nada, sino entremetiéndose en lo ajeno. A los tales mandamos y exhortamos por nuestro Señor Jesucristo, que trabajando sosegadamente, coman su propio pan. (2 Tesalonicenses 3:10-12)
En el barbecho de los pobres hay mucho pan; Más se pierde por falta de juicio. (Proverbios 13:23)
El labrador, para participar de los frutos, debe trabajar primero. (2 Timoteo 2:6)
El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga qué compartir con el que padece necesidad. (Efesios 4:28)
Deja una respuesta