MENTE, CARÁCTER Y PERSONALIDAD-parte 37-
INDEPENDENCIA MORAL Y DE ESPÍRITU. Se requerirá valor e independencia para elevarse por sobre las normas… No debemos ceder ni un ápice a las prácticas corruptas e idolátricas.
LOS RIESGOS DE LA INDEPENDENCIA PERSONAL: Siempre recordemos lo que debemos a nuestra profesión cristiana como pueblo de Dios, y cuidémonos de que al ejercitar la independencia personal su influencia no obre contra los propósitos de Dios, y así usted, por medio de las trampas de Satanás, llegue a ser una piedra de tropiezo directamente en el camino de los débiles y vacilantes.
Hay peligro en dar al enemigo ocasión de blasfemar a Dios y amontonar desprecio sobre los creyentes en la verdad.
INDEPENDENCIA DE ESPÍRITU: La independencia de espíritu puede inducir a tener demasiada confianza en si mismo, y a confiar en su propio juicio.
LA AUTOSUFICIENCIA NO EXPONE A LOS ARDIDES DE SATANÁS: Vivimos en medio de los peligros de los últimos días, y si tenemos un espíritu de autosuficiencia e independencia, estaremos expuestos a los ardides de Satanás y seremos vencidos.
INDEPENDENCIA MORAL
LA LEY DE DEPENDENCIA MUTUA: Todos nosotros estamos entretejidos en la gran tela de la humanidad, y todo cuanto hagamos para beneficiar y ayudar a nuestros semejantes nos beneficiará también a nosotros mismos. La ley de la dependencia mutua afecta e incluye a todas las clases sociales. Los pobres no dependen más de los ricos, que los ricos de los pobres.
Mientras una clase pide una parte de las bendiciones que Dios ha concedido a sus vecinos más ricos, la otra necesita el fiel servicio, la fuerza del cerebro, de los huesos y de los músculos, que constituyen el capital de los pobres.
ES UN DEBER OBEDECER LAS CONVICCIONES RELIGIOSAS INDIVIDUALES: Muchos son los artificios de que Satanás se vale para encadenar a sus cautivos por medio de las influencias humanas. El se asegura la voluntad de multitudes atándolas con los lazos de seda de su afectos a los enemigos de la cruz de Cristo.
Sea cuál fuere esta unión: paternal, filial, conyugal o social, el efecto es el mismo: los enemigos de la verdad ejercen un poder que tiende a dominar la conciencia, y las almas sometidas a su autoridad no tienen valor ni espíritu independientes suficientes para seguir sus propias convicciones acerca del deber.
SE SACRIFICA EL JUICIO INDIVIDUAL: Por muy convencidas que estén la razón y la conciencia, estas personas que profesan ser religiosas en las iglesias populares, no se atreven a pensar de otro modo que como los ministros, y sacrifican su juicio y sus intereses eternos al descreimiento, orgullo y prejuicios de otra persona.
SOSTENER INDEPENDIENTEMENTE LO CORRECTO: Se requerirá valor e independencia para elevarse por sobre las normas religiosas del mundo cristiano. Ellos no siguen el ejemplo de abnegación del Salvador; no hacen sacrificios; están constantemente buscando evadir la cruz que Cristo declara que es la señal del discipulado.
INDEPENDENCIA MORAL CUANDO SE OPONE AL MUNDO: La independencia moral estará completamente en su lugar cuando se opone al mundo. Al conformarse enteramente a la voluntad de Dios, estaremos en terreno ventajoso y veremos la necesidad de separarnos de las costumbres y prácticas del mundo.
No hemos de elevar nuestra norma sólo un poco por encima de la del mundo; sino que hemos de hacer definidamente clara la línea de demarcación.
LA INDEPENDENCIA MORAL ES UNA VIRTUD: Nuestra única seguridad es permanecer como el pueblo de Dios. No debemos ceder ni un ápice a las costumbres y modas de esta época, sino mantenernos con independencia moral, sin entrar en componendas con sus prácticas corruptas e idolátricas. (Elena White)
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