LA FUENTE DE CURACION-parte 80-
EL COMERCIO DE LAS BEBIDAS ALCOHÓLICAS-parte 3-
LA ACTUACION DEL VENDEDOR DE BEBIDAS-parte 3-
El alcohólico es capaz de mejores cosas. Fue dotado de talentos con que honrar a Dios y beneficiar al mundo; pero sus semejantes armaron lazo para su alma, y medran a costa de la degradación de su víctima. Vivieron en el lujo, mientras que las pobres víctimas a quienes despojaron fueron sumidas en la pobreza y la miseria. Pero Dios llamará a cuenta a quien ayudó al borracho a precipitarse a la ruina.
Aquél que gobierna en los cielos no ha perdido de vista la primera causa o el último efecto de la embriaguez. Aquél que cuida del gorrión y que viste la hierba del campo, no pasará por alto a los que fueron formados a su propia imagen y comprados con su propia sangre, ni será sordo a sus clamores. Dios nota esta perversidad que perpetúa el crimen y la miseria.
El mundo y la iglesia podrán dar su aprobación al hombre que amontona riquezas degradando al alma humana. Podrán sonreír a quien conduce a los hombres paso a paso por la senda de la vergüenza y la degradación. Pero DIOS lo anota todo, y emite un juicio JUSTO.
El traficante de bebidas alcohólicas podrá ser considerado por el mundo como un buen comerciante; pero el Señor dice: “¡AY DE EL!” Será culpado de la desesperación, de la miseria, y de los padecimientos traídos al mundo. Tendrá que dar cuenta de las necesidades y desdichas de las víctimas que hayan padecido por falta de alimento, de ropa y de abrigo, y hayan perdido toda esperanza y alegría.
LA PROHIBICION
El hombre que contrajo el hábito de la bebida se encuentra en una situación desesperada. Su cerebro está enfermo y su voluntad debilitada. En lo que toca a su propia fuerza, sus apetitos son ingobernables. No se puede razonar con él ni persuadirle a que se niegue a sí mismo.
El que ha sido arrastrado a los antros del vicio, por mucho que haya resuelto no beber más, se ve inducido otra vez, y apenas pruebe la bebida, sus más firmes resoluciones quedarán vencidas, y aniquilado todo vestigio de voluntad. Se olvida de la esposa, ya no le importa que sus hijos sufran hambre.
¿Seguirán las almas luchando por la victoria, teniendo ante ellas y abiertas de par en par las puertas de la tentación? Cuando un buque zozobra, los espectadores no permanecen indiferentes. Hay quienes arriesgan su vida para ir en auxilio de hombres y mujeres a punto de hundirse. ¿Cuánto más esfuerzo debe hacerse para salvar al alcohólico?
Muchos son los “valientes para beber vino”, y los “hombres fuertes para mezclar bebida”, “que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo”, “que dan por justo al impío por cohechos, y al justo quitan su justicia”. De los tales dice DIOS:
“COMO LA LENGUA DEL FUEGO CONSUME LAS ARISTAS, Y LA LLAMA DEVORA LA PAJA, ASÍ SERÁ SU RAIZ COMO PUDRIMIENTO, Y SU FLOR SE DESVANECERA COMO POLVO; PORQUE DESECHARON LA LEY DE JEHOVÁ DE LOS EJERCITOS, Y ABOMINARON LA PALABRA DEL SANTO DE ISRAEL” (Isaías 5:20-24)
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