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MENTE, CARÁCTER Y PERSONALIDAD-parte 22-

DILIGENCIA- Dios ha dado al hombre el intelecto, y lo dotó con capacidades para cultivar, entonces, aferrémonos de Dios, pongamos a un lado la frivolidad, y las impurezas. Venzamos los defectos de carácter….

ALCANZAR LA MAXIMA CAPACIDAD POSIBLE: Debería considerarse cuidadosamente el verdadero objeto de la educación. Dios ha confiado a cada uno facultades y poderes para devolvérselos aumentados y mejorados.  Todos sus dones nos son concedidos para ser usados al máximo. 

El requiere que cada uno de nosotros cultivemos nuestros poderes y alcancemos la máxima capacidad posible de utilidad, para que podamos hacer una obra noble para Dios y bendigamos la humanidad. Cada talento que poseemos, ya sea de capacidad mental, dinero o influencia, es de Dios, de modo que podemos decir con David:

Todo es tuyo, y de lo recibido de tu mano te damos” (1 Cron.29:14)

LAS BELLAS CUALIDADES MENTALES NO SON RESULTADO DE UN ACCIDENTE: En cualquier ramo de trabajo, el verdadero éxito no es el resultado de la casualidad ni del destino.  Es el desarrollo de las providencias de Dios, la recompensa de la fe y de la discreción, de la virtud y de la perseverancia.  Las bellas cualidades mentales y un tono moral elevado no son el resultado de la casualidad. Dios da las oportunidades; el éxito depende del uso que se haga de ellas.

LA CULTURA MENTAL ES LO QUE NECESITAMOS: La pobreza, la cuna humilde y las circunstancias desfavorables que nos rodean no necesitan impedir el cultivo de la mente. Las facultades mentales han de ser mantenidas bajo el control de la VOLUNTAD y no permitir que la mente divague o se distraiga con una cantidad de temas a la vez sin concentrarse en ninguno.

OPORTUNIDADES AL ALCANCE DE TODOS: Hay oportunidades y ventajas que están al alcance de todos para fortalecer los poderes morales y espirituales. La mente puede ser expandida y ennoblecida. Nuestras facultades deben ser cultivadas al máximo, o dejaremos de alcanzar la norma divina.

A menos que la mente fluya en dirección al cielo, llegará a ser fácil presa de la tentación de Satanás, pero si los poderes de la mente pertenecen a Dios serán desviados al blanco correcto.

AFERRENSE DE DIOS Y AVANCEN: Dios ha dado al hombre el intelecto, y lo dotó con capacidades para cultivar, entonces, aferrémonos de Dios, pongamos a un lado la frivolidad, las impurezas. Venzamos los defectos de carácter. 

Aunque hay una tendencia natural a seguir un camino descendente, hay un poder que se combinará con los diligentes esfuerzos del hombre.  Si se combina con esta ayuda divina, podrá resistir la voz del tentador. 

Pero las tentaciones de Satanás armonizan con  nuestras tendencias defectuosas y pecaminosas, y nos impulsan a pecar.  Todo lo que tenemos que hacer es seguir al líder Jesucristo, quien nos dirá precisamente lo que se debe hacer.

DIOS NOS LLAMA DESDE SU TRONO EN EL CIELO, MOSTRANDONOS UNA CORONA DE GLORIA INMORTAL, Y NOS RUEGA QUE PELEEMOS LA BUENA BATALLA DE LA FE Y CORRAMOS LA CARRERA CON PACIENCIA.  CONFIEMOS EN DIOS A CADA MOMENTO. FIEL ES EL QUE CONDUCE HACIA ADELANTE.

EL ELEVADO IDEAL DE DIOS PARA SUS HIJOS: El ideal que Dios tiene para sus hijos está por encima del alcance del más elevado pensamiento humano.  La mente a alcanzar es la piedad, la semejanza a Dios. Tenemos que alcanzar un objetivo, lograr una norma que incluye todo lo bueno, lo puro, lo noble.

Debemos progresar los más lejos posible en todo lo referente al verdadero conocimiento. Nuestros esfuerzos se dirigirán a fines tanto más altos que el mero egoísmo y los intereses temporales, cuanto son más altos los cielos que la tierra. (Elena White)

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