MENTE, CARÁCTER Y PERSONALIDAD-parte 138-
LAS DUDAS. “Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes” (Efesios 6:12). –parte 3-
NO HAY EXCUSA PARA HABLAR DE DESANIMO: “El cuál (el Padre) nos ha librado de la potestad de las tinieblas” (Col.1:13). Si ésto es cierto, ¿qué excusa tenemos entonces para hablar acerca del desánimo, la incredulidad y la duda, para rodearnos de tinieblas como si éstas fueran un manto?
Hagamos retroceder la oscura sombra de la duda, poniéndola a un lado para que la lleve Satanás, originador de toda duda y desánimo. El está tratando de extender su sombra infernal a lo largo de nuestra senda. Nuestra fe debe pasar a través de la oscura nube de la duda y la incredulidad y aferrarse del brazo de Cristo, que está más allá.
COMO RECHAZAR LA SOMBRA DE LA DUDA: Cuando Satanás tiende su sombra infernal sobre mi senda, no la miro ni hablo de ella, ni glorifico al diablo hablando de él y de su poder, y de los momentos difíciles que me ha hecho pasar. No atravieso la sombra, y por fe me aferro a Jesucristo. Al contemplarlo somos:
“transformados de gloria en gloria a su misma semejanza”.
Hablemos acerca de la fe. Cada duda que manifestemos es una semilla que se siembra, y esa semilla echará raíces en algún corazón. No querramos pronunciar una sola palabra de duda para alabar así al diablo por el gran poder que ha ejercido con el fin de mantenernos en sujeción. NO; Cristo me ha adquirido y me ha redimido. Satanás no tiene poder sobre mí.
FALSAS IDEAS ACERCA DE DIOS: Satanás triunfa cuando puede inducir a los hijos de Dios a la incredulidad y al desaliento. Se regocija cuando nos ve desconfiar de Dios, dudando de su buena voluntad y de su poder para salvarnos. Le agrada hacernos sentir que el Señor nos hará daño por sus providencias.
Es la obra de Satanás representar al Señor como falto de compasión y piedad. Tergiversa la verdad respecto a El. Llena la imaginación de ideas falsas con relación a Dios; y en vez de espaciarnos en la verdad respecto de nuestro Padre celestial, muchísimas veces fijamos la mente en las falsas representaciones de Satanás y deshonramos a Dios desconfiando de El y murmurando contra El.
Satanás siempre procura presentar la vida religiosa como una vida de tinieblas. Desea hacerla aparecer penosa y difícil; y cuando el cristiano, por su incredulidad, presenta en su vida la religión bajo este aspecto, secunda la falsedad de Satanás.
CERREMOS LA PUERTA DEL CORAZÓN A LAS DUDAS:
“Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes” (Efesios 6:12)
Satanás reclama el mundo como suyo. Pretende que sea suyo. Entonces, ¿le daremos lo que reclama? NO. Somos propiedad de otro. Hemos sido comprados por precio, y nuestra tarea consiste en glorificar a Dios en nuestro cuerpo y en nuestro espíritu. No tenemos que hablar de la incredulidad.
Debemos hablar de la fe. Tenemos que fortalecer la fe por medio del ejercicio. Y entonces mi fe crecerá a medida que me aventure basándome en las promesas de Dios, y así puedo abarcar cada vez más. Bendito Jesús, El es nuestro consuelo, nuestra esperanza, nuestra oportunidad y nuestro recurso.
Elena White
Continúa en parte 139
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