AMPARO Y FORTALEZA –parte 18-
USTED PUEDE DEJAR DE FUMAR-parte 1-
El deseo de dejar de fumar es bueno en sí mismo, pero muchas personas cometen el error de confundir un mero deseo con la fuerza de la voluntad. Junto con el deseo de dejar de fumar, usted necesitara movilizar su fuerza de voluntad para lograr una acción positiva.
Creemos que la mejor manera de dejar de fumar es dejar el cigarrillo de inmediato: nada de ir haciéndolo de a poco. La razón es sencilla; es mejor tener unos pocos días difíciles y terminar con la costumbre, que arrastrar el problema durante semanas y meses. Nuestro propósito es ayudarlo a sobreponerse al deseo por el cigarrillo tan rápidamente como sea posible. De hecho, en cinco días.
Cuando se deja de fumar, la parte más difícil sobreviene en los primeros tres días, pero al fin de los cinco días la mayoría de las personas encuentra que el deseo por el cigarrillo ha menguado en forma definida, o se ha ido. Manténgase firme durante diez días, y usted habrá obtenido la victoria. Dígase: “Yo resuelvo NO fumar”
Siga repitiendo su decisión durante todo el día, desde que abre los ojos hasta el último bostezo de la noche.
Durante el período de fuerte deseo por el tabaco, mire su reloj. Observe el segundero mientras recorre la esfera. No importa cuán fuerte sea ese apetito, usted con toda certeza puede abstenerse de fumar durante sesenta segundos. Habiendo ya pasado un minuto, puede mantenerse por un minuto más. Cuando pasa el tercer minuto, usted habitualmente descubrirá que ese deseo tan fuerte ha pasado su punto culminante y ha empezado a debilitarse.
Va a necesitar toda su fuerza de voluntad, pero cada hora adicional y cada día nuevo hará crecer su determinación y su fuerza de voluntad. Sugerimos a continuación algunas reglas que lo ayudarán en los momentos de fuerte deseo por el tabaco, y en su camino hacia una nueva forma de vida.
- AGUA POR AFUERA: Tome un baño caliente dos o tres veces por día, de quince a veinte minutos de duración. Relájese. Si siente que no puede aguantar más sin fumar, métase de nuevo en la bañera o bajo la ducha. Es muy difícil fumar bajo el chorro de agua.
- AGUA POR DENTRO: Beba cada día de seis a ocho vasos de agua entre las comidas. Vaya anotándolos, si es necesario. Mientras más líquido beba, más rápidamente la nicotina se eliminará de su cuerpo. No tome ninguna bebida alcohólica, ni siquiera vino o cerveza.
Al principio usted puede verse obligado a tomar una cantidad menor hasta que su estómago se acostumbre a ello. Pero comience a formar el hábito de beber agua como primera cosa al levantarse cada mañana. Beba luego dos vasos de agua entre el desayuno y la hora del almuerzo, y otros dos en algún momento durante la tarde.
Esto hará un total de seis vasos, Al aumentar sustancialmente su consumo de líquidos durante las primeras 24 horas, usted podrá descubrir que estará venciendo el apetito por el tabaco mucho antes.
- LA IMPORTANCIA DE LA REGULARIDAD: Obtenga suficiente descanso durante estos cinco días, tenga horas regulares para comer, una hora fija para ir a la cama (ocho horas de sueño no le harán mal). No recurra a entretenimientos nocturnos durante estos cinco días. Usted necesita conservar bien su sistema nervioso.
Haga, pues, planes para acostarse un poco antes que de costumbre. Deles a esos nervios un buen descanso. La fatiga en sus muchas formas es un enemigo de la fuerza de voluntad.
- NO SE SIENTE DESPUÉS DE LAS COMIDAS: Después de las comidas, salga, camine y respire profundamente de quince a treinta minutos. No se siente después de comer. Este es el tiempo en que usted sentirá más ansias de fumar. Salga afuera.
La investigación médica indica que las zonas frontales del cerebro, habitualmente las primeras en resultar afectadas por una provisión insuficiente de oxígeno, están asociadas íntimamente con las funciones de la fuerza de voluntad, la razón y el juicio. Por lo tanto, durante los próximos días, cuando usted necesita toda su fuerza de voluntad y calmar los nervios, decida tomarse tiempo adicional para disponer de una cantidad extra de oxígeno, particularmente después de las comidas.
- SEA CUIDADOSO CON LO QUE BEBE:
Continúa en parte 2
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